Un pensamiento devocional...

“No os olvidéis de mostrar hospitalidad, porque por ella algunos, sin saberlo, hospedaron ángeles”- Hebreos 13:2

“No conoció que Yo o cuidaba”- Oseas 11:3

¿Crees que los ángeles son niños alados? ¿Crees que los ángeles son personajes mitológicos? Pues te equivocas. Los ángeles son poderosas criaturas espirituales creadas por Dios cuya función ha sido, es y será cumplir cualquier mandato que el Creador les dé, incluyendo cuidar a sus hijos/jas. Este relato te certifica que todavía los ángeles interactúan con los seres humanos en misiones de cuidado y rescate:

“Un misionero viajaba por los Estados Unidos predicando el Evangelio de Jesucristo. Un lluvioso sábado por la  noche el misionero viajaba de un estado a otro pues debía llegar al otro día en la mañana a una iglesia donde tenía un compromiso como predicador invitado.

   El misionero estaba muy cansado y soñoliento. En oración le pidió al Señor que lo ayudara a mantenerse despierto, para poder llegar seguro a su compromiso del día siguiente.

    Unos minutos después, el misionero se encontró en el camino con un hombre que le pidió que lo llevara. Aunque no acostumbraba montar a ningún extraño en su automóvil; esa noche decidió detenerse y llevar al hombre.

   Tan pronto el extraño se sentó en el asiento del pasajero, comenzó a hablar muy amenamente con el misionero. Le dijo que era un creyente en Jesucristo y que estaba en aquel lugar cumpliendo una misión. Las largas horas de la noche pasaron sin que el misionero conductor se diera cuenta, mientras hablaba amigablemente con aquel extraño; contándose mutuamente las experiencias que habían tenido en los caminos.

   Sin darse cuenta comenzaron a salir los primeros rayos del sol dominical; y el extraño le dijo al misionero que ya había llegado al lugar donde quería llegar. Al misionero le dio mucha pena dejarlo, pues había sido una extraordinaria compañía. Se le ocurrió invitarlo a tomar café en el primer restaurante que encontraran abierto. Así lo hicieron…

   Desayunaron juntos y cuando salieron del lugar, ya la lluvia había cesado. Se despidieron con un afectuoso apretón de manos, y el misionero siguió su camino muy agradecido por la magnífica noche que había pasado.

    De pronto se dio cuenta de que no le había pedido al hombre que lo había acompañado ni el nombre ni la dirección. Así que decidió regresar al restaurante. Cuando llego no vio al extraño por ninguna parte. Así que le pregunto a la camarera que le había servido, si había visto a aquel hombre con el que había desayunado minutos antes. Ella lo miro extrañada y le dijo:

 - “Señor, usted entró aquí solo, nadie venia con usted, y nadie se sentó con usted en la mesa. De hecho, a mí me extraño que pidiera dos cafés y dos desayunos, para luego dejar un café y un desayuno sin tocar sobre la mesa”

   El misionero miró con extrañeza la mesa donde había estado sentado conversando con el extraño. Para su sorpresa, allí estaba el café y el desayuno extra que había pedido sin tocar.

   Maravillado por el descubrimiento, regresó a su automóvil; entonces se dio cuenta de que cuando recogió al extraño estaba lloviendo torrencialmente y sin embargo, el asiento no estaba ni siquiera húmedo” – Tomado de “The Finishing Touch”, por Charles R. Swindoll.

    La Escritura dice que muchos, sin saberlo hospedaron ángeles. Los ángeles son criaturas creadas por Dios como nosotros, no pueden en ninguna forma ser objeto de nuestra adoración. Dios enviará a sus ángeles a guardarte, ayudarte, protegerte; tu deber es agradecerles al Padre y al Hijo por tanto amor…

Por: Griselle M. Trujillo   gtrujillo913@gmail.com